viernes, 27 de diciembre de 2013

Vivo por fuera y muerto por dentro V

Capitulo 5- Conflicto

-¡Escuchen! Una gran horda de aproximadamente unos treinta y siete o cuarenta de esas cosas se acercan a una velocidad de setenta y dos kilómetros por hora, por el paso que llevan seguramente nos alcanzarán en unos tres minutos. Nos estacionaremos en la pradera  enfrente de nosotros, los jóvenes prepárense, hay armas donde ya saben, así que mejor no mueran ¡Me escuchan bola de inútiles!
Termino de dar el aviso Albert atreves del radio. 
-¿Qué? Setenta y dos kilómetros por hora, eso es demasiado incluso para un centenar, que será y es la primera vez que peleamos organizadamente, bueno desde la semana pasada, donde el cambio paso. Dijo argumentándose Vel así mismo.
-Tranquilo, todo estará bien, Anny no estará en peligro. Le dijo John con una sonrisa en la cara.

Y como dijo Albert, se detuvieron en una formación donde se tenía cubierto a todos los ancianos, adultos, niños y bebés por los camiones de los adolescentes, quienes bajaban velozmente y se formaban en posición para pelear.
Cuando se dieron cuenta una cosa grotesca y horrenda salía a lo lejos de la carretera. Una clase de gato enorme, con las piernas y cola cubiertas de pelaje, lo demás estaba descubierto, dejaba ver la carne roja y musculosa, los ojos entrecerrados como una fina línea donde se distinguía el ojo, uno finos ojos felinos amarillos verdosos completamente, no se veía la línea negra de los ojos gatunos.
Dientes enormes que sobresalían como agujas gruesas y toscas que desgarrarían carne sin el más pequeño problema, y una lengua enorme y grotesca capaz de cortar la carne como cuchillo delgado y fino. Esa cosa con forma de gato enorme corría a una velocidad asombrosa y tenebrosa, con unas garras que parecían cuchillos y brillaban con la luz de las dos de la tarde que al tocarlo con el piso se rompía y quebrantaba con el peso de la bestia.
En seguida algunos jóvenes empezaron a disparar como si no hubiera mañana.
Sin algún logro evidente, y el fuego seso cuando una joven grito;
-¡Basta!
Una chica dio un paso hacia adelante firme y segura, de cabello negro y ondulado largo hasta la cintura que tapaba completamente su cara, y un mecho azul eléctrico que deslumbraba como una reina, dio unos pasos hacia adelante y con un arma que cargaba, una Paralela Arzur, café cacao, con metal negro reluciente y fino, con una insignia dorada, y un colgante azul del mismo tono que el mecho de su cabello, apunto hacia la monstruosidad, llevaba una gabardina negra que con el aire la levantaba y dejaba ver una camisa holgada negra, un cinto de cuero, en sus piernas un pantalón igual negro y unas botas grandes que llegaban hasta la rodilla, de cuero y en la planta del pie unos cinco picos, que al acomodarse, teniendo una pierna atrás y otra adelante, disparó.
Retrocediendo un poco pero la postura le ayudo a no caer y al sostenerla con las dos manos salió volando el arma, y con ese disparo le reventó una pierna a esa cosa, ella cargo nuevamente, pero otros chico al estar más cerca esa cosa, dispararon pero esa cosa las esquivo saltando y evadiendo las balas.
Cuando esa joven recargo disparo otra vez, esta vez disparo a quitarle las dos piernas de enfrente, y con un tercero. Le voló la cabeza.
En ese momento algunas al estar cerca de ellos se pusieron en pie y les brotaron pulgares en las patas delanteras.
Todos se alegraron, pero Vel ni John estaban seguros, habían dicho entre treinta y siete y cuarenta, ¿dónde estaban los demás?
Cuando volvieron la vista un rugido temerario de un felino resonó en todo ese valle, y atrás de del cadáver del primero, muchos más de esas cosas salieron corriendo saltando entre árboles y corriendo por la carretera.
Paty al ver eso retrocedió y se fue a la camioneta, y los insultos no se hicieron esperar, empezaron a disparar acabando con unos cuantos, pero muchos más se acercaban. Vel tomo un rifle Tac M50, que se acomodo enzima de una roca, apuntando disparo cuatro veces, tres de las cuales, acertaron en el cráneo y la ultima en la pata derecha delantera del que estaba más cerca. 
John por su parte estaba tomando un par de cuchillos largos y afilados a los cuales inserto en una vara de metal sujetándolas con un tornillo. Y preparándose para el enfrentamiento cuerpo a cuerpo.
Cuando entraron a la pradera todos corrieron retrocediendo, tomando a un joven de trece años por los pies y separando la cabeza del cuerpo jalándola con su boca y sujetando el cuerpo al piso penetrando las garras en la espalda del chavo, cuando la separo líneas gruesas de sangre salían del cuello y manchaban el verde e inocente pasto. Dejando la cara del joven con una cara de horror y los ojos blancos, siendo explotada por la fuerte y brutal mordida de la bestia.
Cuando iba a rugir el animal cabeza tuvo la misma suerte que la del chavo, reventada por las mismas balas que antes, la joven de antes con una mirada fría sosteniendo las armas ahora con una mano, y un guante negro. Con una mirada fría y asesina, unos ojos amarillos cobre relucientes, y un collar en forma de triangulo.
Vel disparaba lo más rápido y certero que podía, pero esas cosas eran muy rápidas, y John escondido entre los árboles se preparaba para atacar con sus espadas-lanzas.

Cuando la joven del mechón azul, se quedo sin balas saco una espada miniatura de su pierna, y guardo el arma en el estuche en su espalda. siendo atacada por una de esas cosas desde la espalda ella se agacho esquivando, y dando una patada con sus bota derecha en la cara de otra, moviéndose hacia atrás y dejando caer su peso hacía atrás, haciendo un arco esquivo a otro que se lanzaba contra ella de un costado, haciendo una maniobra para reincorporarse dando una vuelta de carro hacia atrás y pateando efectivamente a otra de esas cosas arrojándola contra el piso y su cara chocando contra una piedra filosa, haciendo un giro esquivo a otras dos, salto sobre una de ellas apoyándose en su cabeza salto alto y estando arriba arrojo su cuchillo contra la cabeza de otra y cayendo con una patada que le reventó la cabeza a otra, recogiendo su cuchillo del resto enorme de aquello, ignoro a otra que se escondía en un árbol, cuando volteo vio como era alejada por el choque de una bala del rifle de asalto de Vel, regresando corriendo contra tres de esas cosas saltando y quitando el sujetador de sus botas que desprendieron dos navajas algo grandes y muy afiladas, cayendo con sus manos en el piso y sus pies arriba empezó a girar dando patadas a las caras de esas cosas, deformándoles la cabeza, y regresando los sujetadores cuando los cuerpos cayeron sin cabeza, y rodeada sangre solo se limpio un poco de su mejilla, recargando las balas nuevamente.

John ayudando a cubrir a la chica golpeando y degollando a 3 de esas cosas le preguntó:
-¿Cómo te llamas?
-Solo dime Jey. Respondió ella guardando el arma y sacando otro cuchillo similar al otro, ambos de color negro y con colgantes diferentes, uno con la inicial L y otra E.
Se cubrieron las espaldas mientras unas diez de esas cosas les rodearon. John haciendo movimientos ligeros y rápidos cortaron los músculos de las piernas de esas cosas dejándolas tiradas. Y Jey haciendo movimientos para acercarse y cortarles el cuello a otras.

-Dime Jey, ¿Donde aprendiste esto? Es decir, pelear así quizás me enseñes algún día. Pregunto John mientras alejaba a las cosas con sus herramientas encajándolas en los músculos frenando su ataque, ya sea en las manos o patas.
-En casa, mis padres me enseñaron todo esto, igual no te lo debo de contar. Y quizás te enseñe algunas cosas, igual no peleas nada mal. Dime tú, ¿como las dejas tiradas? ¿Cómo las frenas?
Pregunto Jey de una manera amistosa pero poco fluida, quizás por el cansancio
-Simple, tienen la misma anatomía que la de un gato normal, solo que enorme y lleno hasta el tope de esteroides. Mi padre fue veterinario, ¡Ah es cierto! Mi nombre es John me disculpo por no presentarme antes. Termino de contestar John, igual cansado, ya que antes de ir a ayudarle a Jey el se enfrento en los árboles a otras tres.
Cuando quedaron cansados, acabaron con los diez que tenían encima, algunos no se podían mover y otros simplemente aniquilados, uno más salió del bosque, siendo frenado por la bala de Vel. Pero el al tratar de disparar nuevamente se dio cuenta que ya no tenía balas, trato de buscar en sus bolsas, pero, se tardo mucho. Una de esas cosas se acerco mucho y estando enfrente del comenzó a correr hacia Vel. John se percato y al tratar de correr hacia Vel una de esas cosas lo tomo del pie, al regresar la mirada vio como lo que quedaban en el piso se ponían de píe, y sus heridas eran regeneradas, y la cosa que le tomo el pie le sonrió de una manera grotesca y tétrica.

-Mierda. Dijo John.
Siendo reventada la mano de esa cosa por el rifle de Jey, quedaron nuevamente rodeados, algunas de esas cosas se empezaron a levantar del pasto carmesí sonriendo de manera a burla. Hasta el momento cuando se aventaron a John, Jey y Vel.

John solo pensaba en proteger a Vel, y llegar junto a él para volarle la cabeza a esa cosa.
Jey en su mente era un misterio, no sabía que pasaría, ella estaba exhausta igual que John.
Vel estaba petrificado ante esa cosa acercándose rápido y ferozmente. Y no podía correr ya que tenia sujetada la mano el rifle con una agarradera para que no es moviera el rifle al disparar. Y la única preocupación que tenía fue la de su hermana Anny.
Hasta que ante sus ojos vio unos finos hilos que brillaban tenuemente frente a él. Y Jey observo como una joven se movía en manera de danza.

¿Quién era esa niña?

No hay comentarios:

Publicar un comentario