martes, 31 de diciembre de 2013

Vivo por fuera y muerto por dentro IX

Bueno,un aviso antes, como me iré por una semana con mis abuelo y ellos no tienen internet, púes me tendré que limitar a dejarles un capitulo hoy. Y aunque escribiré diario, llegare a publicar los capítulos. Y eso no será hasta dentro de una semana aproximadamente. Feliz año nuevo y cumplan sus metas en el siguiente año lleno de felicidad y personas.

Capitulo 9- Explicaciones

En un día reluciente y muy bello, a una semana de la presentación de Juria y Togam. Albert se encuentra en su camión custodiado por ellas dos.
Un camión enorme, por la parte de atrás es normal, asientos, dos baño más grandes, personas adultas en ambos extremos. Pero por el frente es más peculiar, hasta extraño.
Esta dividida por una pared del mismo metal que el hacha de Juria, para no hacer pesar demasiado al camión, y detrás de esa pared se encuentra una anivelasión de tres pisos, en lo más abajo se encuentran los conductores, nada interesante. En la segunda plataforma azul claro están Juria y Togam sentadas, supervisando y vigilando a los conductores, Juria sentada con una pierna cruzada y un refresco en la mano derecha, Togam sentada formal y con una postura recta sin gesto en su cara. Y en la más alta que sobresalía del camión, cubierto con el metal, estaba Albert, en un asiento que parecía cama, por lo largo pero aún así tenía la misma figura que un asiento más inclinado hacía atrás.
Rodeado de cámaras, él observaba cada movimiento, de todos los sobrevivientes que se encontraban arriba, a excepción de los baños, Albert vestía un short verde pantano, una camisa sin mangas y un cuello triangular de color blanca y ajustada, a decir verdad estaba bien formado y en forma. Una chamarra no muy gruesa con un tono verde fuerte, un collar con sus iniciales, Albert Cusher, con unas botas de montaña cafés.
Él observaba detenidamente un cierto individuo con más resentimiento y misterio;
-Vel. Dijo cruzandoce de manos, y mirando detenidamente.
-¿Qué cazo tiene mantenerlo con vida?, solo fue un fracaso que adoptaron esos estúpidos, sigo sin creer que siga aún con vida.
Cuando fue interrumpido por Juria que le informo;
-Señor, en el radar de Specruss.
-Te tomarías la molestia de repetirme que son los Specruss, para que Togam se informe. Dijo Albert calmadamente.
-Claro señor. Asintió Juria arrogante, y con una sonrisa de oreja a oreja recito;
-Specruss, tomada del español Espectros, que hace referencia a las abominaciones más retorcidas del ser humano, pero a diferencia de esta definición Specruss es una palabra que da a entender bestias, los tan llamados Zombies son una muestra de estos, pero no solo se limita a esto, también están las Quimer que son los animales felinos o caninos infectados que mutan exorbitantemente, los Centenares que son los lideres o reinas que dominan el grupo de los Zombies, son algo así como la reina abeja, que es un parásito que se alimenta de cierto cromosoma y ayuda a su crecimiento cuando esta a punto de morir sale a la superficie y se defiende como ultimo método. Se dividen por nueve diferentes niveles, los Zombies normales no son más que del nivel uno o dos a lo mucho, los centenares se limitan al tres, las Quimer son cinco o hasta seis dependiendo del tipo animal que se infecto, como tigres, leones, lobos o zorros. Las Martyrs clasificados como nivel 7 son insectos de una cierta clase, los escarabajos y escorpiones que resistieron las pruebas, crecen de una manera horrorosa y su masa incrementa monstruosamente, generando un veneno que te infecta al contacto con tus venas. ¡Oh! Por cierto, la única manera en la que te puedes infectar es por medio que te muerdan en caso del nivel dos o tres, muy pocas veces por el aire en el tres y cuatro, del cinco al  siete solo con contacto directa de la sangre y por alguna de sus garras o aguijones. Los ocho no son más que, los generados de las pruebas directas, como lo fueron los Ghost de hace una semana, pero hay más clases como, las doncellas, cazadores, corpulentos y más, pero la mayoría esta muerta.
Y por ultimo los nivel nueve, son los modelos perfectos, no conozco a ninguno. Por lo que te puedo decir que son inexistentes.
Explico Juria tranquilamente a Togam que la observaba de perfil, y solo pregunto;
-¿Como comenzó esto?
Y Juria respondió con otra sonrisa.
-Fueron obra de, los científicos por crear una enfermedad que plantará miedo en la población, para así seguir controlandolos. Pero los franceses crearon una al mismo tiempo que los estadounidenses, y decidieron juntarles. ¡El acto más estúpido que escuchado! Al final lo lograron, pero lo que no sabían que al inyectarla en animales estos guardaban reposo y al incubar el virus el tiempo suficiente, se relevaron y acabaron con toda Francia, y en USA no hizo esperar, sin embargo- Siendo interrumpida por Togam.
-Lo se, la expansión se propago por los insectos.
Albert algo sorprendido le pidió a Togam;
-Me sorprende y favorece que estés bien informada. Pero dejando eso de lado, ¿cuantos se acercan y que nivel son?
-Son unos cuarenta nivel siete, señor. Dijo Togam con calma.
Albert se levanto en un salto y presiono un botón, y de esta manera se abría contacto con los demás camiones para informarles.
-¡Escuchen, una gran orda de esas cosas se acerca, son cerca de cuarenta y son altamente peligrosos, no se dejen pinchar por sus aguijones!
Dejando a todos sumidos en preocupación y dudas. John y Vel estaban dormidos, pero Albert revisó en las pantallas en los mapas algún lugar donde estacionarse para pelear, y encontró una orilla del un lago cercano.
-¡Nos quedaremos en un pequeño lago, me oyeron mocosos de mierda, quiero que acaben con ellos sin alguna baja o preparence para no comer!
Los adolescentes soltaron un sonido de rabia, era evidente que no les gustaba ser presionados de una manera tan drástica. Paty pensó en algún plan, pero miro a John y Vel que se yacían en un sueño profundo. Y giro para ver a Brun, que pensaba en algo.
-(Me alegra haber aventado esa espada a John, fue un gran golpe de suerte, atinarle al arma que manejará. Todos son buenos, pero necesito mejorar). Pensó mientras los camiones llegaban a la orilla del camino abajar.
Faltaban unos treinta o cuarenta minutos para que llegarán hacer contacto, los jóvenes se reunieron y acomodaron sus cosas.
John tomo su espada doble que pensó perderle cuando cambiaron de autobús. Jey se planto firme sobre la arena seca y cargo su rifle. Paty llego al centro del lago no muy grande con una valsa improvisada que hizo Vel, extendiendo sus hilos en el agua flotando con lo fuertemente espesa del agua. Vel se preparo con una ametralladora ligera M249 y se rodeo de balas, descansando en el techo de su camión, no quería repetir la misma historia.
Juria y Togam salieron del camión enorme, separandoce con una mirada segura y llena de arrogancia venenosa de parte de Juria, y Togam con una mirada seria sin gesto alguno.
Juria tomo su hacha y recargo sobre el camión en el que estaba Vel. Y le dijo;
-Con que tu eres el chico que se desmayo.
-(¿Quien es ella?). Pensó.
-Me llamo Juria. Dijo Juria alegremente.
-Mi nombre es Vel. Dijo con voz fuerte y segura.
-Eso lo se, dime... ¿Crees poder proteger a John?
-(¿Ella conoce a John?). Se dijo sorprendido.
-Mira, yo tuve a alguien quien debía proteger... Y por no ser lo suficientemente fuerte, no lo logre. Dijo Juria con mirada desesperanzada y algo enojada.
-Si, tengo la fuerza suficiente para protegerlo. Dijo Vel mientras observaba por el amplificador de vista, y veía como John calentaba con Jey.
-Me alegra oír eso, nos veremos muy seguido. Joven Vel. Termino de decir Juria mientras se alejaba lentamente.
-¡Eso espero Juria, no mueras!
Exclamo Vel de manera amistosa, cuando ella escucho eso sus ojos se abrieron y una expresión de exalto se hizo presente sobre la piel blanca y ojos bellos. Una imagen paso por su cabeza, era un chico con la cara oscurecida
-Claro que no, compañero. Dijo Juria cordialmente.
A Vel le pareció una buena persona, fuerte y con poca tolerancia, pero una buena persona. Así que no hizo caso a su sorpresiva llegada, pero recordó que John le dijo que una chava llamada Juria con las misma características lo salvaron, por lo que se despidió con una sonrisa.

En otro lado Brun calentaba con movimientos inseguros y temblorosos.
-Un consejo, no tengas miedo de esas cosas. Dijo una voz amable y muy gentil.
Cuando Brun volvió la cabeza, encontró a la chica de cabello rojo vivo, y los ojos azul claro tan gélidos y con un brillo peculiar.
-H-hola, me llamo Brun.
-Lo se, eras el chico en el árbol, mi nombre es Togam. Un placer. Dijo ella levantando la mano, por un momento Brun se pegunto como es que lo había notado, si noto a Jey. Pero por algo era la guarda espaldas de Albert.
-Ah, claro. Dijo sosteniendo la mano de Togam.
-Si quieres mejorar será mejor que no tiembles, además de sostener el arma con toda la palma, no solo con los tres dedos centrales, el pulgar te ayudara mucho. Dijo Togam levantando la mano y moviendo los dedos que indicaba.
-Gracias, me ayudara. Dijo Brun admirando la belleza que se encontraba enfrente, para asomarla, según él, deslizo las cadenas haciendo dos el arma.
-Vaya, una doble arma, que interesante admitió Togam, y se acerco a Brun. -Me permitirías enseñarte como tomar debidamente el arma.
-C-claro. Dijo Brun dejandoce abrazar por Togam, haciendo cazo a sus indicaciones pudo sentir los enormes pecho  de Togam sobre su espalda, esponjosos y suaves.
-Brun... Me gustaría que no se excitará o pensará cosas indebidas mientras presiono mis pechos contra usted. Dijo Togam sonrojada y apenada.
-¡L-lo siento!
Se disculpó Brun mientras saltaba y se alejaba de Togam, cuando logro ver la cara de Togam le pareció tierna incluso indefensa.
-B-bueno, yo se que tiene cosas por hacer, y yo igual. Me acomodaré si me permite. Dijo ella sacando un rifle Cheytac M200 color rojo obscuro metálico que acomodo sobre una enorme roca, seguido se levanto y empezó a quitarse la camisa blanca que traía puesta, sacando una color azul.
-¡¿Q-qué estas haciendo?!
Dijo Brun sorprendido.
-Disparar un arma de tan fuerte trayecto lastima con este tipo de ropa. Dijo Togam con solo la ropa interior superior, el vestido no se lo quito y sonrojada, en seguida se puso una camisa más ligera. -Le pediría que dejará de mirarme de esa manera.
-No... Se preocupe. Y deja de hablarme de usted, basta con llamarme Brun. Él dandoce la vuelta para no verla, y pidiéndole eso.
-Claro... Brun. Dijo Togam sonrojada con la mirada un poco baja, a Brun le pareció completamente lindo y tierno.

lunes, 30 de diciembre de 2013

Vivo por fuera y muerto por dentro VIII

Capitulo 8- Secretos

En el filo de la luna, unas cuantas nubes se embalsamaban en la infinidad del cielo nocturno, mientras momentos de tensión y desesperación se quedaban en el suelo.
Vel sin algún movimiento se quedo tieso observando a la bestia, denominada por él como Ghost, que rosaba su cara delicadamente con sus tiesas y frías manos, John corrió para detenerlo pero al gruñir esas cosas mostrando sus enormes dientes se detuvo, quedando conmocionado por la increíble flexibilidad de su cuello que giro repentinamente de una manera monstruosa. Vel sentado sobre una silla hecha instantáneamente de madera, solo se veía tapado por la inmensa sombra del Ghost que no tenía visibles intensiones de lastimarlo, se acerco la cosa y lamió el cachete de Vel, el joven sintió su elida lengua pasar por su cachete, e inmediatamente un escalofrío pasar sobre su espalda con los músculos tensados.
Tomo el cuchillo alado del plato delicadamente, se puso firme, extrañando al Ghost, y al olfatear un poco cambió de una manera drástica, teniendo un temperamento agresivo y cruel, se curvo y saco la lengua. John gritando que se alejara al tiempo que Vel corto ligeramente la garganta en un movimiento rápido y eficaz, cayó sobre el piso con la silla sobre su espalda y la criatura saltando hacia atrás para caer en un árbol sosteniéndose con su mano izquierda.
-¡Vel!
John corrió hacia él, pero esa cosa se cruzo en su camino e interfiriendo su paso, John noto que Vel estaba desmayado, quizás por el golpe que se dio, solo esperaba que no fuera nada grave, regreso la mirada al Ghost que se preparaba para saltar con sus dos pares de piernas.
John levanto la espada preparándose para la pelea, no sabía si moriría, pero lo que más le importaba era proteger, a Vel.
Esa cosa corrió rápidamente con sus cuatro piernas de una manera asombrosa, pero John logro ver cuando sus músculos se tensaron por lo que pudo hacer un movimiento fino e impulsado con gran fuerza, cuando la criatura se percato y se agacho hacia atrás pasando por debajo del corte y cortando ligeramente su nariz.
John recuperando el equilibrio se cubrió de un garrotazo que soltó la bestia antes que se diera cuenta, desviando la mano con las grandes garras cosidas a los dedos por dentro, sin uñas y la ultima falange. John tomo fuerza y encesto un fuerte golpe levantando la espada y llevándola abajo con mucha fuerza, pero la bestia se movió ágilmente evadiendo el golpe, y dando una fuerte patada con su pierna derecha delantera, haciéndolo retroceder hasta un árbol. 
Cuando esa cosa se aventó contra él abriendo la enorme boca, John se agacho y dio una voltereta hacia un costado, reincorporándose y aventando un cuchillo en dirección del Ghost, este abrió la boca emitiendo un sonido tétrico y saltando hacia la penumbra de los árboles, por un momento pensó que se había ido, pero al oír una rama estremecer supo que no.
Analizo las diferentes opciones que se presentaban, esperar a que la bestia atacara, correr hacia Vel que se yacía tendido en el suelo, pero si lo hacía estaría indefenso él y podría ser atacado desde la espalda, desecho esa opción y pensó, avanzaría lentamente para llegar a él y cuando esa cosa saltara la golpearía.
Tomo caso de la primera y se fue acercando lentamente a Vel, sin bajar la guardia escuchó un silbido seco y frío, como un metal rosar con el viento gélido de esa noche. Reacciono inteligentemente al ver un brillo particular que sobresalió del bosque, y frenando el brillo con su espada, cuando escucho el coche de metales se dio cuenta que era su espada, una espada doble. Con dos hojas, una a cada extremo que brillaba como agua, un mango naranja con líneas morado muy obscuro casi negro, y unos anillos al acabar el mango y comenzar la hoja, circulares y con elevaciones en forma de lobos, que miraban el brote de la espada.
La tomo mientras giraba dichosa en el aire con su mano izquierda, cuando esa cosa noto su oportunidad salto de lo alto de un árbol saliendo de las hojas que con la luz parecían joyas verde amarillo, generadas por el cercano otoño, John lo supo y arrojo la espada que sostenía con la mano derecha en dirección de la cabeza de esa cosa, con la mayor fuerza que tenía y remarcando sus músculos en la camisa.
El Ghost distinguió el proyectil acercándose y esquivando el arma que logro cortar parte del pecho y dejando una línea delgada en el pasto manchándolo de rojo.
John haciendo maniobras corrió en diferentes direcciones para distraer al Ghost, pero este lo noto y empezó a rasguñar con sus manos a John, el joven desviando las grandes garras con sus doble espada haciendo movimientos tranquilos y bien maniobrados pasando las hojas por arriba de su cabeza, los costados de su torso, girándolas por sus fornidos brazos, sin tensarlos y bien relajados le ayudaban a desviar fluidamente. 
El Ghost se poso sobre sus dos piernas traseras, comenzó a patalear y rasguñar a John sin algún excito en por lo menos rosar su cabello, John sonrió fríamente y movió con mayor velocidad las hojas no solo desviando los ataques, si no cortando ligeramente las manos y piernas, cuando un chorro de sangre choco con su cara proveniente de un corte más profundo, la cosa retrocedió y al tratar de ponerse en dos piernas, este cayó sobre el suelo con los músculos desgarrados y cortados por las hojas finas de John.
Trato de cubrirse la cara pero sus manos no le hicieron caso, cayendo sobre el pasto. John con su cara seria, se acerco y al encestar el golpe para atravesar su cráneo, el Ghost se cubrió la cabeza con su lengua. John trato de cortar la lengua pero esta se regeneraba a una velocidad espeluznante, cociendo y entrelazando los músculos de la lengua tensados fuertemente, en manera de gusanos penetrando en la carne que se movía como signo del dolor.
John se hartó y pateo la cabeza, al no ver una respuesta se dirigió a Vel, para saber cómo se encontraba, Vel solo estaba dormido sin alguna herida, despreocupando a John, cuando escucho el crujir de algunas hojas que se posaban en el piso, John giro y encesto un fuerte ataque con su hoja, posada en el interior de la boca enorme y abierta tratando de dar una mordida dejando inmóvil al Ghost y saliendo un chillido estremecedor y fuerte que se escuchaba en todo el bosque, John la dejo un momento en ese lugar, pero de las heridas que tenía en las piernas delanteras y en las manos, cuyas cayeron, pararon de regenerarse, y después de dos o tres segundos, una cantidad enorme de sangre salió de ellas, igual que en la parte superior del cráneo dejando salir finos hilos de sangre roja claro, carmesí y rosa. Y por debajo, adentro de la fosa del Ghost, solo salían ligeras corrientes de sangre, que caían de los dientes y lengua de semejante abominación. Parando de salir la sangre a chorros, solo salían pequeñas cantidades que resbalaban de las manos, torso y piernas, pero John noto que la cortada que había hecho Vel regresaba y se abría, después empezó a extenderse enormemente sobre el cuello, y despegándose la cabeza con la mitad del cuello, y rompiendo la piel que sostenía ligeramente el cuerpo, igual que la carne siendo rebanada sin explicación que llegaba hasta el final del cuello. Lo siguiente solo fue el cuerpo caer hacía atrás, después de caer y unos cuantos segundos salían hilos de diferentes tamaños y grosores de la parte pegada al torso, haciendo un lago carmesí con rocas de cristal amarillentas del ámbar, y de la cabeza solo salían gotas y unos cuantos chorros. John asqueado y haciendo muecas arrojo la cabeza cerca de los árboles, sosteniendo a Vel entre sus brazos.
Cuando otros pasos se escucharon pero al volver la cabeza noto que otra de esas cosas que olfateaba y lamía la cabeza, al dirigirse a John este gruño y saltó, dejando salir un rugido similar al del león, solo que más ronco y tenebre.
John se cubrió con la espada pero, esa cosa fue degollada con un corte, dejando volar la cabeza y el cuerpo desviándose de John, con un pequeño espacio se veía una hoja de hacha, gruesa y letal.
Cuando la cabeza cayo solo se escucho un chirrido, y el cuerpo emanando la misma cantidad desangre que la del otro, una mujer salió fuertemente de la sombra, una mujer de 17 años, con una gorra con el estampado de camuflaje militar, el cabello recogido en una coleta, un cabello negro y brillante que difícilmente se distinguía si era blanco con sombras marcadas o negro e inimaginables destellos, muy chino y esponjoso. Con una cara seria y algo temperamental, ojos amarillos igual que el ámbar, unos ojos de amarillo ámbar y sombras cafés, piel blanca, luciendo una camisa de cuero, una camisa blanca que dejaba ver sus atributos, unos pantalones negros y unas botas grises enormes, en las manos un montón de pulseras de diferentes materiales y estilos. Una mujer extrañamente fuerte y guerrera, una amazona.

Se puso de pie y le dijo a John;
-Con esas cosas, no se tiene que jugar.
-¿Los Ghost?
Pregunto John mirando a los ojos a esa mujer, y sosteniendo a Vel fuertemente.
-Con que sabes cómo se llaman, bueno no creo que sepas mucho. Por cierto me llamo Juria.
Dijo la joven.
-Mi nombre es John, un placer. Dijo cordialmente John.
-Me gusto la manera con la que jugaste al matar a ese Ghost.
Dijo Juria meneando el hacha.
Un hacha con un mango largo de metal y cadenas plateadas, con un disco antiguo en la hoja, con un borde interior que cambiaba de colores, y la hoja, una bella hoja de hacha inigualable. Gruesa de metal puro y fino con un matizado negro y el filo resaltaba con un gris simpático, grande y fornida, parecía pesada pero no lo era.
 -Dime, ¿No te pesa?
Pregunto John.
-No, es una aleación de metales, que la hacen mucho más ligera, no pesa más que dos kilos. Respondió con una mirada seria.
-Entiendo. Dijo John levantándose y cargando a Vel. Con su espada sobre su espalda con un pedazo de correa. -Bueno, te veo luego Juria, necesito llevar a Vel para que descanse.
-Entiendo, un gusto, nos veremos pronto. Dijo Juria mientras John salía del bosque con Vel en brazos.

Cuando Juria se dio la vuelta se agacho para esquivar un golpe de nunchakus.
-¡Ese era mío!
Dijo una voz adentro de las hojas de los árboles.
-Lo siento. Dijo Juria entre risitas.
-Yo lo seguí. Dijo el joven saliendo de la sombra, era Brun.
-Pero dime, ¿para qué lo seguiste? No ibas a poder matarlo. Dijo Juria posando la palma de su mano contra su cintura y colgando el hacha.
-Claro que si, además no tenías porque meterte. Replico Brun
-Esa era mi presa, grábatelo bien, ese era un Ghost, un Specruss nivel 8. Nada que ver con las Quimer que mataron anteriormente. Ni los Centenares, menos uno normal. Dijo Juria tomando el hacha con las dos manos.
-¿Y?
Replico nuevamente Brun tomando los nunchakus y haciéndolos un palo de metal.
-Si quieres pelear solo actuar, Baka. Dijo Juria en pose para pelear. A lo que Brun soltó un bufido y corrió en dirección de Juria, ella esperando el golpe que daría Brun.

Brun soltó un golpe en dirección a las piernas de Juria, pero ella salto dando una patada para la cara de Brun, él solo se agacho hacia atrás y giro su bastón para alejarla, Juria solo salto y cayó con una manera virtuosa, tratando de cortar en dos a Brun. Brun detuvo el golpe de Juria con otro golpe, haciendo chocar el metal de ambos y sacando chispas, Brun retrocedió, seguido se adelanto y empezó a dar golpes de manera rápida, pero Juria los evadía con su hacha y al dar un paso mal Brun ella aprovecho para atacar, dando cortes fuertes y de una manera sanguinaria que Bruno trataba de desviar con su vara metálica, pero eran muchos de una manera rápida, a lo que Brun engaño a Juria desprendiendo su arma en dos y agarrando la hacha con la cadena, quedaron estáticos.
-¡Ja! Te gane. Dijo Brun arrogantemente. 
-Eso crees. Dijo Juria feliz, a lo que Brun le pareció extraño, pero al girar hacia abajo noto una daga que salía del final de la agarradera del arma.
Pero Brun saco volando las armas en el aire alzando los brazos fuertemente, y Juria retrocediendo un paso, Brun encesto una patada al hombro de Juria y ella un puñetazo en el estomago, dando una vuelta ambos tomaron sus armas y seguros de degollar al prójimo se alejaron y al momento de apuntar con el arma, una bata negra surco el cielo para frenar el enfrentamiento, con un rifle enredando la cadena dejándola inmóvil, y un cuchillo frenando al hacha en su trayecto asesino.
Era Jey quien estaba posada sobre la base amarilla, con una mano levantada apuntando a Brun y otra frenando a Juria hacia abajo por su estatura no tan alta.
-Par de animales, ¡¿Qué creen que hacen?!
Dijo Jey mientras apuntaba, en eso ambos se calmaron y regresaron las armas de una manera pacífica, pero la mirada a muerte entre Juria y Brun se cruzaban, cortándola con la mirada seria de Jey en medio.
-Solo era un poco de diversión. Y niño, no peleas nada mal. Dijo Juria mientras caminaba en dirección del bosque y Jey le grito;
-Tu nombre.
Siendo respondida rápidamente.
-Juria Lanin. Y desaparecía en el bosque

Mientras Jey regañaba a Brun, él le explico;
-Yo fui tras esa cosa, porque escuche que John y Vel estaban aquí, en una ¿cita? Pero vi una de esas cosas pasar por los árboles en esa dirección.
-Ya veo, bueno, púes si te preocupas así por ellos, bienvenido al grupo. Dijo Jey.
-¿En serio?
Dijo Brun exaltado.
-Si, pero ten un perfil bajo, ya sabes las reglas. Le recordó Jey.
-¡Claro!
Dijo entusiasmado Brun.
Platicado mientras salían del bosque toda la gente estaba ordenada en un círculo, y ellos se levantaron en un árbol para que no los notaran.
Albert estaba en medio, y a sus costados, dos niñas. Juria y otra joven de cabello rojo como el fuego, ojos azules claros como el agua del mar en una mañana, con unas dos o tres pecas, una esbelta figura y grandes atributos igual que Juria, con un vestido de una pieza y falda corta color negro, y unos tacones algo altos, con piel clara y brillante, Albert tomo la palabra.
-¡Escuchen, ellas dos son mis guarda espaldas, Juria Lanin y Togam Groshett, Juria como combate cuerpo a cuerpo y Togam como larga distancia!
Todos dieron aplausos, mientras tanto como Brun y John quedaban asombrados.
-Con que a eso se refería. Dijo John mientras estaba sentado y abrazando a Vel dormido, que podía ver en la ventana.
-Esto tendrá mala pinta. Dijo Brun enojado y Jey sin alguna expresión en su rostro, quizás...

Ya lo sabía.

domingo, 29 de diciembre de 2013

Vivo por fuera y muerto por dentro VII

Capitulo 7- Regreso de las pesadillas

Ya dos días después de la cena que se hizo en honor a los jóvenes por semejante victoria, los camiones regresaron al camino largo y aburrido a los que estaban acostumbrados, Vel estaba sentado con un libro titulado El corazón del débil, en el cual estaba muy concentrado no se dio cuenta que John le quería decir algo,  haciendo cosas para llamar su atención. no lo logro y mejor se dio por vencido, dandoce la vuelta y acomodandoce para dormir.
Después de un rato, Vel acabo de leer el capitulo 17, cerrando el libro, regresado a John y después de moverlo unas cuantas veces, le dijo a John;
-¿Me querías decir algo?
Con un tono simpático y calmado.
-No, ya no. Dijo John con tono enojado e hiriente.
-Pero no tienes porque hablarme de esa forma. Le reclamo Vel.
-Claro, después de ignorarme como por media hora aún quieres que te hable de una manera tan cordial, púes disculpe majestad. Dijo John casi gritándole.
-¿Qué? Disculpa si no te hice cazo, la verdad es que, cuando leo un libro púes no me percato de lo demás que me observa... Lo siento. Disculpandoce Vel encojiendoce entre hombros y desviando la mirada ligeramente.
-Bueno, si me lo dijiste, pero es que es muy importante lo que tengo que decir.
-Si, bueno... Yo también tengo algo que decirte,o más bien hacer. Dijo Vel sonrojado.
John se levanto y cerro las persianas, con cuidado ya que la mayoría estaba dormida o escuchando música con audífonos.
-¿Es tan importante?

Pregunto Vel mientras John se sentaba, mencionando en voz baja.
-Bueno... No es que deba decirlo abiertamente pero... Cuando te beso siento algo... Creo que me estoy enamorando.
Vel se sonrojo y se dio la vuelta hacia la ventana para que John no lo viera sonrojado.
-P-púes es normal que sientas algo... No es nada anormal.
Y John asombrado le pregunto.
-¿Te excitas?
-¡¿Qué?! ¿Qué clase de pregunta es esa?
Dijo Vel retrocediendo hasta topar con la ventada, y luego preguntando exaltado.
-Bueno, eso es lo que yo siento. Dijo John mirando con una mirada penosa y tímida, que observaba  hacia el piso del camión que estaba llena de mochilas.
-¡Púes eso no es algo que me debas decir, no tan repentinamente!
Dijo Vel sonrojado y enojado.
-Bueno, es que no me gusta tener secretos. Comento John.
-Pero, hay cosas que no se dicen así. Le dijo a John tomándolo del hombro y acercandoce John para darle un beso.
Siendo interrumpidos por un joven.
-¡Lo siento pero quería saber si tienen refresco!
Vel sorprendido nuevamente se alejo de John tomando el libro simulando leerlo.
-N-no, no tenemos. Dijo Vel sonrojado.
-Disculpa, no tenemos. Dijo John calmado y tranquilo, reincorporandoce a su asiento.
-A bueno, no se preocupen, mi nombre es Brun O'Gleen, un gusto.
Dijo el chico con una mirada amigable. El chico era moreno, cabello negro y un copete largo y un poco chino, tapado por un gorro de lana negro, con ojos verde como un olivo joven, sano y fuerte, alto y fuerte con músculos desarrollados casi como John, con una camisa azul obscuro algo pegada y unos jean's azules rotos de las rodillas junto al final unos tenis blancos.
-Mi nombre es John, y el del joven con el libro al revés es Vel. Dijo John mirando a Vel.
Vel no se percato que tomo el libro al revés y tenía que presentarse, reaccionando de una manera obvia y algo absurda, fue tomando el libro debidamente.
-L-lo siento, me llamo Vel, y para tu información soy tan listo que puedo leer el libro al revés.
Dijo Vel de una manera sonrojada e insegura.
-Claro, como digas. Dijo John y luego preguntando. -Y ¿donde te sientas?
-Dos asientos adelante que ustedes, junto a mi compañero Jeim Enric. Dijo Brun mientras señalaba los asientos.
Vel girando la cabeza, y al regresarla le dijo;
-Ya veo, un placer, pero tenemos cosas que discutir entre nosotros dos, no quiero sonar grosero pero...
-No te preocupes, yo también peleo con mi compañero, bueno los dejo.
Dijo Brun de una manera muy cordial. Y ya estando lejos, cerraron y Vel comento.
-Pero que buen chavo, es muy amigable.
-¿Qué? Si me dejas por ese le parto la- Dijo John cortado por Vel.
-No, claro que no. Bueno ya, en la noche te tendré una sorpresa.
-¿Enserio? ¿Lo haremos?
Dijo John emocionado.
-¡No! Y deja de pensar en solo eso.
Dijo Vel cortante y exaltado.
Luego empezaron a pelear y cayendo la tarde, Albert decidió dar la orden de parar en un bosque cercano a causa de buscar alimento, ya que con el pasado no fue suficiente.
John se metió a bañar porque Vel le pidió que se arreglará lo más formal posible para la sorpresa. Vel afuera en un rincón del bosque con ayuda de Jey y Paty llevaron cajas, y cajas de cosas, guiadas adentro del bosque para llegar al lugar.
En unos cuarenta minutos tanto como John y Vel estuvieron listos, John salió del camión arreglado y perfumado.
Luciendo una camisa negra de vestir que resaltaba su piel blanca, en su mueca una pulsera que de él colgaba una figura en forma de diente de cristal naranja que con la luz y sombra jugaba a cambiar de tono, una bufanda naranja rojiza larga que enredada en su cuello le llegaba a su cintura, un cinto con hebilla pequeña y plateada en forma de cuadrado, unos pantalones negros algo ajustados, unos tenis formales, no deportivos, color negro con gris, con su cabello mojado y brillante que llegaba casi a sus ojos y le faltaba poco para cubrir su cuello, parecía casi blanco con la luz de la luna flotando firme y elegante en el firmamento. Con sus ojos grises con unos finos brillos naranjas que resaltaban de su cara, con una ligera sonrisa y un percing en el oído izquierdo.
Afuera Paty con un vestido de una pieza azul y unos cuanto brillos en la cintura, con un escote poco pronunciado y las manos descubiertas, con el cabello recogido y por debajo unos aretes azul claro, maquillada ligeramente. Su cara asombrada de lo guapo que se veía John, le dijo;
-Vaya, ¡que guapo! Vel te espera, por favor sigame. Dijo Paty dando paso con sus tacones azul metálico.
-Claro. Dijo John tranquilamente.

En el camino entre árboles John le pregunto a Paty;
-Bueno, ¿Y Jey?
A lo que ella respondió.
-Haciendo una distracción para mantener a Albert lejos, además no nos iremos hasta pasado mañana por la mañana.
-Ya veo. Termino de decir John cuando Paty le dijo;
-Bueno, llegamos John. Señalando hacia enfrente.
Un lugar rodeado por árboles e iluminado por los rayos de la luna plateados y blancos, que dejaban ver una cena deliciosa en una base de cristal amarillo, de ámbar generado por árboles, un pasto verde obscuro y fresco, con copas de cristal y platos de porcelana, con una botella de champagne verde con dorado y muy vieja.
A lado, Vel con una camiseta blanca ajustada y una camisa de vestir gris abierta por encima, unos pantalones negros, zapatos negros y brillantes, y unas correas grises que colgaban de la cintura. Con su cabello negro fresco y brillante, que por lo largo le taparía los ojos pero estaba acomodado de manera que pudiera ver teniendo mechones en medio de los ojos y otros a lado, y sus ojos se tornaron de un color turquesa, de pie.

Paty se alejo desapareciendo en el bosque, dejándolos solos y a gusto, John quedo fascinado con el aspecto de Vel, y Vel quedo enamorado de lo bien que licia John.
Se sentaron, y ambos comenzaron a hablar, comer y reír. John se resistía un poco a tomar, por lo que Vel decidió guardar la botella y tomar agua. Muy contentos ambos, Vel se perdió en la mirada de John.
Cuando se mancho sin darse cuenta, John se acerco y le limpió con su boca a lado de los labios de Vel. Diciendo cosas absurdas y bobas esa noche, pasaron dos horas, luego tres, hasta que los interrumpió sorpresivamente un sonido, John grito;
-¡¿Quién es?!
Pero nadie respondió, John levantandoce saco de la mochila arrumbada alado de la base de cristal, una espada larga y fina, que era propiedad de Vel, regalo de su primera madre. Se acerco al bosque en dirección del sonido, y de la nada salto una bestia, la misma que hace tiempo atormento a Vel, quedando tendida sobre la base esa figura humana descrita como antes por él, observo a Vel detenidamente, y John corriendo para frenar al monstruo que tocaba la cara en shock de Vel con su mano, sacando la lengua para sentir el miedo dejando ver sus colmillos enromes y sus ojos cosidos con hilo grueso y brillante.

sábado, 28 de diciembre de 2013

Vivo por dentro y muerto por fuera VI

Capitulo 6- Baño

Esos finos hilos pasaron a escasos centímetros de la cara de Vel y recorriendo velozmente hacia la bestia, al topar con ella se escucho un chillido, y cuando Vel abrió los ojos observo como esa cosa era descuartizada y cortada. Rebanando sus extremidades, los hilos sin alguna dificultad penetrando en sus músculos, pelaje y huesos fue dejando atrás, fue seguido por otros cuatro hilos más de la misma composición; finos, delgados y transparentes casi imperceptibles sino es por sus brillo generado por el brilloso sol.
Atravesando a la bestia, y al terminar, hizo salir montones de litros de sangre, en forma de hilos gruesos y otro de manera exagerada hacia arriba. Haciéndolo caer en el pasto en un charco de sangre sin extremidades y hechas cubos o tiras, además de cortar a la mitad la cara de aquello.
Vel al quedar tan impactado giro violentamente la cara hacia John y Jey.
-¡John!
Grito recargando lo más rápido que pudo.

En el espacio en el que se encontraban John y Jey, cuyos estaban rodeados por las quimeras pero fueron separados por cinco hilos iguales, en medio de ellos y esas cosas empezaron a danzar de una manera fluida y tranquila distrayendo un poco a las bestias, pero cuando regresaban de esa distracción fueron ejecutadas velozmente por los hilos, cuyos cortaron con la misma facilidad, dejaron caer brazos y trozos en el pasto ya ensangrentado. Dando un ejecute final rebanando la cabeza por un costado, no por la mitad de la cara, sino se podía ver en algunas el cerebro viscoso e inquietante, y en otros la mitad de los ojos amarillos y verdes.
Jey asombrada, y John fascinado giraron a la chica, que por el sol y su posición, encima de una roca grande y alta solo se podía ver la silueta, dando unas vueltas y moviendo sus manos gentilmente, haciendo parecer que estaba bailando ballet con un listón.
Al ser atacada desde su espalda por la ultima de esas cosas, tapando el sol y dejando ver su ropa y cara.
Era Paty, con un vestido azul fuerte y por debajo unas mallas negras, unos zapatos negros relucientes, una camisa gris apocada por otro suéter amarillo pálido tejido a mano, con los mismos lentes y el mismo cabello, solo que diferente mirada, una segura y eficaz, como la de una madre protegiendo a su cría.
Solo giro delicadamente su cara y al momento de cortar su cabeza, esta misma fue reventada por la bala disparada desde el rifle de Vel a una distancia de treinta metros, como si se parara de moverse el tiempo y espacio, Jey aprecio la masa monstruosa siendo degollada por 10 hilos finos y firmes, firmes como una espada, la cabeza flotando seguida de ser reventada como una fruta aplastada por un zapato, y el cuerpo ser empujado por una patada de Paty, luciendo una silueta gentil, elegante y señorial.
Quitando la sangre que caía como lluvia asida por sus hilos apartándolos como oleadas de aire sin tocar a Paty.
Cuando toco el pasto limpio que estaba enfrente de la piedra, cayo arrodillada, generado por el cansancio¡, a lo que John y Jey corrieron hacia ayudarla, Vel quito la agarradera y fue a ver que ocurrió después del asombroso espectáculo. Cuando llegaron Paty les detuvo con una seña, levantando la mano y la palma abierta queriendo hacer una señal de alto. Se detuvieron a escasos paso de ella, dándole espacio ella se puso en pie y pregunto;
-¿He tenido éxito?
Jey acercandoce a ella, levantándola del hombro diciéndole;
-Claro que si. Paty sonriendo y regresando a la normalidad todo le aplaudieron y siendo alagada John le pregunto inquietamente.
-Eso fue increíble. Siendo interrumpido por fuertes palmadas, provenientes de las manos de Albert.
-Vaya, vaya la niña ha demostrado ser fuerte, dime escuincla ¿Dónde aprendiste eso?
-Señor, me lo enseñaron mis padres, y se los agradezco, que dios los tenga en su gloria. Dijo Paty enredando los hilos en soportes metálicos que saco de sus bolsillos del abrigo.
-Entiendo, bueno... Será mejor que se tomen un baño, ya no hay nada cerca. Los adultos irán a recolectar comida y quitarán los muertos. Seguido de Vel que pregunto.
-¡¿Cuantos murieron?!
-Solo 7 chico, no te preocupes. Dijo Albert mirándolo de una manera apaciguadora, regresando a su postura. -Ya que no hay agua suficiente y se tardarán en ir a traerla, se bañarán por parejas, de asiento por supuesto. ¡Además! De que lavarán ropa, ha pasado tres semanas desde que hicieron eso, y una ultima cosa, ¡Asombrosa pelea, mis felicitaciones para John Lier Blou, Vel , Jey, y Patricia Sascie, lo demás parecieron niñitas!
Retirandoce y dándole una palmada en el hombro a Vel, quien se quedo satisfecho pero incomodo por las bajas. Y haciendo un pequeño grupo entre los mencionados.
-Con que Blou es tu apellido. Dijo John abrazando a Vel con su mano.
-Si. Respondió Vel alagado por el abrazo.
-Dime, ¿nos hemos visto antes?
Pregunto Jey.
-Seguramente no. Dijo Vel impactado por la similitud entre las caras de Jey y Paty.
-¿Qué pasa?
Pregunto Paty. -¿Tengo algo en la cara?
-No, nada de eso. Dijo Vel y preguntándole a ambas. -¿Son hermanas?
-No. Ambas respondieron de una manera sincronizada y armónica, mirandoce ambas detenidamente.
-Ella tiene la nariz más grande y esta bisca. Dijo Paty regresando a Vel.
-¡¿Qué?! Púes mira que tu tienes una cara de horror. Dejándola caer en el piso.
-Mira bichito raro, la que esta del horror eres tu. Dijo Paty levantandoce y acercandoce a Jey, chocando las caras con cara de rivalidad, a lo que John y Vel se sintieron incómodos.
-¿Crees que deberíamos irnos?
Pregunto Vel, siendo toqueteado por la mano de John en su nalga derecha.
-¡¿Qué carajos crees que haces?!
Dijo Vel quitando la mano de John.
-Debemos irnos a bañar ¿no?
Dijo John haciendo una cara deseadora.
-No. Impuso Vel regresando la mirada a Jey y Paty.
Quienes estaban abrazadas y felices, con lo que dejo la duda a Vel, pero prefirió no preguntar, no quiera estar en medio de una pelea de chicas, ambas expertas en armas.
-Mejor nos vamos, tenemos que lavar ropa y bañarnos. Dijo Vel despidiendoce de Paty y Jey, quienes se quedaron platicando gustosamente.

Ya más tarde, John y Vel lavando ropa, solos atrás del camión, en un ambiente de noche joven y fresca. Platicaban en completa libertad, ya que los demás, estaban del otro lado del camión donde se preparaba una cena, y todos estaban hay. Entre ese par uno se quejaba.
-¡¿Porqué somos los últimos en bañarnos y estamos lavando ropa?!
Dijo John enojado y emberrinchado.
-Porque, si te pones a pensar, si nos bañamos y luego lavamos, nos mancharíamos de nuevo. Y lavamos a estar horas es porque tu manchaste tus ropas de sangre, y mira que yo ya acabe de lavar lo mío, y tenías mucha ropa, ¿acaso no habías lavado? Y si sigues en esa actitud me largo solo y te dejo aquí. Replico Vel tallando.
-Bueno. John haciendo pucheros, y Vel preguntando.
-¿Qué rayos estoy lavando? Parecen unos short algo grandes y estirables, además de que son de colores oscuros y pálidos. A lo que John hecho una carcajada y volteo a ver a Vel.
-Son mis bóxer.
A lo que Vel se hecho para atrás y empezó a maldecir a John, él solo se reía.
-Me largo. Dijo Vel levantandoce.
-No espera, solo falta eso y una camisa, ¿me esperas?
Dijo John con un tono persistente y una cara de niño perdido.
-No tengo otra opción, ¿no es así?
Dijo Vel recargandoce en la piedra.

Ya acabando de lavar y colgar la ropa, ambos entraron al enorme camión con olor a limón, para disimular el olor de sangre, pero el aire estaba pesado y cargado de ello.
Entraron a tomar ropa limpia, John una camisa gris de lycra, unos jean's azul marino algo desgarrados de las rodillas, unos tenis azules, y unos bóxer negros con figuras azules.
Vel tomo una camisa negra, una chamarra del mismo color con azul, unos jean's negros, se agacho y tomo de una mochila pequeña pulseras azules del mismo color que la chamarra, un azul verdoso, algo pálidos y unos bóxer azul con morado. John haciendo bromas sobre sus bóxer y su combinación de Vel. Vel por su lado trataba de ignorarlo.
Vel entro en el baño de hombres primero, y al ver que nadie veía le dijo a John que tomará el de mujeres, y entro. John algo decepcionado acepto.
Vel en su intimidad, se quito la camisa y se agacho a tomar un jabón,cuando regreso, estaba John detrás de él obserbandolo y analizando su figura.
-¡Ah! ¡¿Qué haces aquí?!
Exclamo Vel, a lo que John contesto tranquilamente.
-Cuando me iba a meter, toque la puerta, y respondió Paty, por lógica no puedo, y además de que Albert dijo que tendríamos que bañarnos juntos, así que te aguantas.
A lo que Vel, oponiéndose enteramente, después de un rato cedió de mala manera, ya ambos de espaldas, John empezó a quitarse la camisa, y Vel desabrochandoce los jean's estaba viendo por el espejo del lavabo, veía los músculos de John que deseaba tocar.
John se levanto y quito el pantalón con facilidad, y Vel igual, quedando los dos en bóxer, y John volteando. Viendo a Vel, él también se dio la vuelta, John mirando el cuerpo de Vel y este mirando al suelo. John le levanto la cara con su mano y dijo;
-Como dije antes, te esperare, no haré nada que no quieras hacer. Y Vel respondiendo.
-Gracias... pero... me gustaría bañarme normal. Cerrando los ojos cuando John lo beso.
Dandoce la vuelta y quitandoce los bóxer, John entro a la regadera, seguido Vel se quedo mirando el espejo y se quito los suyo, entrando detrás de John.
-No hagas nada ¿si?... no mires... ¿De acuerdo?
Dijo Vel tartamudeando de lo nervioso que estaba, y abriendo la regadera de un jalón sintió el agua fría recorrer si cuerpo.
-Si... espero. Dijo John susurrando la ultima palabra abrazando a Vel, sin que él se opusiera mordió la espalda. Vel saltando, se dio la vuelta y gritando;
-¡Te dije que no hicieras nada!
De una manera enojada y a la vez tierna.
-L-lo sien...
Quedando a medias de la disculpa, Vel se percato que John estaba con la mirada baja, a lo que Vel se cubrió y empezó a golpear a John mientras gritaba.
-¡T-te dije que no mirarás!
Afuera solo se escuchaban los golpes que Vel ejercía sobre John y las disculpas de John.

En la cena, John, Paty, Jey y Vel sentados comiendo, hasta Jey le pregunto a John;
-¿Qué te paso en la cara?
A lo que Vel interfirió.
-Se lo gano. Mirando a John con el cachete rojo.
-Me golpeo con el jabón. Dijo John con tristeza.
-¿Y que hizo?
Pregunto Paty.
-¡Nada!
Exclamo Vel tomando una manzana y mordiéndola, mientras John reía.

viernes, 27 de diciembre de 2013

Vivo por fuera y muerto por dentro V

Capitulo 5- Conflicto

-¡Escuchen! Una gran horda de aproximadamente unos treinta y siete o cuarenta de esas cosas se acercan a una velocidad de setenta y dos kilómetros por hora, por el paso que llevan seguramente nos alcanzarán en unos tres minutos. Nos estacionaremos en la pradera  enfrente de nosotros, los jóvenes prepárense, hay armas donde ya saben, así que mejor no mueran ¡Me escuchan bola de inútiles!
Termino de dar el aviso Albert atreves del radio. 
-¿Qué? Setenta y dos kilómetros por hora, eso es demasiado incluso para un centenar, que será y es la primera vez que peleamos organizadamente, bueno desde la semana pasada, donde el cambio paso. Dijo argumentándose Vel así mismo.
-Tranquilo, todo estará bien, Anny no estará en peligro. Le dijo John con una sonrisa en la cara.

Y como dijo Albert, se detuvieron en una formación donde se tenía cubierto a todos los ancianos, adultos, niños y bebés por los camiones de los adolescentes, quienes bajaban velozmente y se formaban en posición para pelear.
Cuando se dieron cuenta una cosa grotesca y horrenda salía a lo lejos de la carretera. Una clase de gato enorme, con las piernas y cola cubiertas de pelaje, lo demás estaba descubierto, dejaba ver la carne roja y musculosa, los ojos entrecerrados como una fina línea donde se distinguía el ojo, uno finos ojos felinos amarillos verdosos completamente, no se veía la línea negra de los ojos gatunos.
Dientes enormes que sobresalían como agujas gruesas y toscas que desgarrarían carne sin el más pequeño problema, y una lengua enorme y grotesca capaz de cortar la carne como cuchillo delgado y fino. Esa cosa con forma de gato enorme corría a una velocidad asombrosa y tenebrosa, con unas garras que parecían cuchillos y brillaban con la luz de las dos de la tarde que al tocarlo con el piso se rompía y quebrantaba con el peso de la bestia.
En seguida algunos jóvenes empezaron a disparar como si no hubiera mañana.
Sin algún logro evidente, y el fuego seso cuando una joven grito;
-¡Basta!
Una chica dio un paso hacia adelante firme y segura, de cabello negro y ondulado largo hasta la cintura que tapaba completamente su cara, y un mecho azul eléctrico que deslumbraba como una reina, dio unos pasos hacia adelante y con un arma que cargaba, una Paralela Arzur, café cacao, con metal negro reluciente y fino, con una insignia dorada, y un colgante azul del mismo tono que el mecho de su cabello, apunto hacia la monstruosidad, llevaba una gabardina negra que con el aire la levantaba y dejaba ver una camisa holgada negra, un cinto de cuero, en sus piernas un pantalón igual negro y unas botas grandes que llegaban hasta la rodilla, de cuero y en la planta del pie unos cinco picos, que al acomodarse, teniendo una pierna atrás y otra adelante, disparó.
Retrocediendo un poco pero la postura le ayudo a no caer y al sostenerla con las dos manos salió volando el arma, y con ese disparo le reventó una pierna a esa cosa, ella cargo nuevamente, pero otros chico al estar más cerca esa cosa, dispararon pero esa cosa las esquivo saltando y evadiendo las balas.
Cuando esa joven recargo disparo otra vez, esta vez disparo a quitarle las dos piernas de enfrente, y con un tercero. Le voló la cabeza.
En ese momento algunas al estar cerca de ellos se pusieron en pie y les brotaron pulgares en las patas delanteras.
Todos se alegraron, pero Vel ni John estaban seguros, habían dicho entre treinta y siete y cuarenta, ¿dónde estaban los demás?
Cuando volvieron la vista un rugido temerario de un felino resonó en todo ese valle, y atrás de del cadáver del primero, muchos más de esas cosas salieron corriendo saltando entre árboles y corriendo por la carretera.
Paty al ver eso retrocedió y se fue a la camioneta, y los insultos no se hicieron esperar, empezaron a disparar acabando con unos cuantos, pero muchos más se acercaban. Vel tomo un rifle Tac M50, que se acomodo enzima de una roca, apuntando disparo cuatro veces, tres de las cuales, acertaron en el cráneo y la ultima en la pata derecha delantera del que estaba más cerca. 
John por su parte estaba tomando un par de cuchillos largos y afilados a los cuales inserto en una vara de metal sujetándolas con un tornillo. Y preparándose para el enfrentamiento cuerpo a cuerpo.
Cuando entraron a la pradera todos corrieron retrocediendo, tomando a un joven de trece años por los pies y separando la cabeza del cuerpo jalándola con su boca y sujetando el cuerpo al piso penetrando las garras en la espalda del chavo, cuando la separo líneas gruesas de sangre salían del cuello y manchaban el verde e inocente pasto. Dejando la cara del joven con una cara de horror y los ojos blancos, siendo explotada por la fuerte y brutal mordida de la bestia.
Cuando iba a rugir el animal cabeza tuvo la misma suerte que la del chavo, reventada por las mismas balas que antes, la joven de antes con una mirada fría sosteniendo las armas ahora con una mano, y un guante negro. Con una mirada fría y asesina, unos ojos amarillos cobre relucientes, y un collar en forma de triangulo.
Vel disparaba lo más rápido y certero que podía, pero esas cosas eran muy rápidas, y John escondido entre los árboles se preparaba para atacar con sus espadas-lanzas.

Cuando la joven del mechón azul, se quedo sin balas saco una espada miniatura de su pierna, y guardo el arma en el estuche en su espalda. siendo atacada por una de esas cosas desde la espalda ella se agacho esquivando, y dando una patada con sus bota derecha en la cara de otra, moviéndose hacia atrás y dejando caer su peso hacía atrás, haciendo un arco esquivo a otro que se lanzaba contra ella de un costado, haciendo una maniobra para reincorporarse dando una vuelta de carro hacia atrás y pateando efectivamente a otra de esas cosas arrojándola contra el piso y su cara chocando contra una piedra filosa, haciendo un giro esquivo a otras dos, salto sobre una de ellas apoyándose en su cabeza salto alto y estando arriba arrojo su cuchillo contra la cabeza de otra y cayendo con una patada que le reventó la cabeza a otra, recogiendo su cuchillo del resto enorme de aquello, ignoro a otra que se escondía en un árbol, cuando volteo vio como era alejada por el choque de una bala del rifle de asalto de Vel, regresando corriendo contra tres de esas cosas saltando y quitando el sujetador de sus botas que desprendieron dos navajas algo grandes y muy afiladas, cayendo con sus manos en el piso y sus pies arriba empezó a girar dando patadas a las caras de esas cosas, deformándoles la cabeza, y regresando los sujetadores cuando los cuerpos cayeron sin cabeza, y rodeada sangre solo se limpio un poco de su mejilla, recargando las balas nuevamente.

John ayudando a cubrir a la chica golpeando y degollando a 3 de esas cosas le preguntó:
-¿Cómo te llamas?
-Solo dime Jey. Respondió ella guardando el arma y sacando otro cuchillo similar al otro, ambos de color negro y con colgantes diferentes, uno con la inicial L y otra E.
Se cubrieron las espaldas mientras unas diez de esas cosas les rodearon. John haciendo movimientos ligeros y rápidos cortaron los músculos de las piernas de esas cosas dejándolas tiradas. Y Jey haciendo movimientos para acercarse y cortarles el cuello a otras.

-Dime Jey, ¿Donde aprendiste esto? Es decir, pelear así quizás me enseñes algún día. Pregunto John mientras alejaba a las cosas con sus herramientas encajándolas en los músculos frenando su ataque, ya sea en las manos o patas.
-En casa, mis padres me enseñaron todo esto, igual no te lo debo de contar. Y quizás te enseñe algunas cosas, igual no peleas nada mal. Dime tú, ¿como las dejas tiradas? ¿Cómo las frenas?
Pregunto Jey de una manera amistosa pero poco fluida, quizás por el cansancio
-Simple, tienen la misma anatomía que la de un gato normal, solo que enorme y lleno hasta el tope de esteroides. Mi padre fue veterinario, ¡Ah es cierto! Mi nombre es John me disculpo por no presentarme antes. Termino de contestar John, igual cansado, ya que antes de ir a ayudarle a Jey el se enfrento en los árboles a otras tres.
Cuando quedaron cansados, acabaron con los diez que tenían encima, algunos no se podían mover y otros simplemente aniquilados, uno más salió del bosque, siendo frenado por la bala de Vel. Pero el al tratar de disparar nuevamente se dio cuenta que ya no tenía balas, trato de buscar en sus bolsas, pero, se tardo mucho. Una de esas cosas se acerco mucho y estando enfrente del comenzó a correr hacia Vel. John se percato y al tratar de correr hacia Vel una de esas cosas lo tomo del pie, al regresar la mirada vio como lo que quedaban en el piso se ponían de píe, y sus heridas eran regeneradas, y la cosa que le tomo el pie le sonrió de una manera grotesca y tétrica.

-Mierda. Dijo John.
Siendo reventada la mano de esa cosa por el rifle de Jey, quedaron nuevamente rodeados, algunas de esas cosas se empezaron a levantar del pasto carmesí sonriendo de manera a burla. Hasta el momento cuando se aventaron a John, Jey y Vel.

John solo pensaba en proteger a Vel, y llegar junto a él para volarle la cabeza a esa cosa.
Jey en su mente era un misterio, no sabía que pasaría, ella estaba exhausta igual que John.
Vel estaba petrificado ante esa cosa acercándose rápido y ferozmente. Y no podía correr ya que tenia sujetada la mano el rifle con una agarradera para que no es moviera el rifle al disparar. Y la única preocupación que tenía fue la de su hermana Anny.
Hasta que ante sus ojos vio unos finos hilos que brillaban tenuemente frente a él. Y Jey observo como una joven se movía en manera de danza.

¿Quién era esa niña?

Vivo por fuera y muerto por dentro IV

Capitulo 4- Problemas

-P-para. Dijo Vel alejandoce y forzando con sus brazos para que John retrocediera.
-Calma...Nadie nos ha visto, no hay porque preocuparse, además... ¿no te gusto?
Pregunto imponentemente John a Vel, pero John respondió;
-S-si, ¡pero ese no es el cazo!
Exclamo Vel retomando la palabra nuevamente. -Te acabo de conocer... Hoy han pasado muchas cosas... mejor, hay que descansar, además... en todo caso que me gustarás, ¡no pienso hacer caso tan repentinamente entiendes. Dijo Vel, acomodandoce en su asiento para caer en el sueño que en ese momento, no estaba presente.
-Entiendo... Lo mejor será dormir. Comento  John con calma y un tono decepcionado, seguido de estar momentos viendoce a la cara, el se dio la vuelta y cerrando los ojos.
John trataba de dormir, más no lograba por lo emocional que estaba después de lo sucedido, en cambio Vel, estaba peor, pensaba en ir al baño a terminar. Sin embargo sería muy obvio y quizás John lo seguiría, sin embargo, después de unos minutos logro alcanzar el sueño y cayo profundamente dormido.
En su sueño, él estaba acostado en un pastizal verde lleno de pasto y con un sol imponente, un calor momentáneamente fuerte, se podía ver el sudor caer de su frente y cara, con una camisa verde con gris, y un short café crema. de la nada las flores empezaron a florecer debajo de el, elevándolo por el cielo, y dejándolo caer entre una holeada de pétalos de diferentes flores, rojos pétalos como la sangre de rosas, flores enteras de alcatraces blancos como la pureza, pétalos enormes de girasoles amarillos como el sol y pétalos rosas de cerezos Sakura tan finos como la piel misma acabando de despertar.
Al caer esta en un gran lago de agua pura y cristalina, lleno de peces vivos y amables, tan agradables y tiernos, pero al ver un pez muerto, y parpadear el agua transparente y fresca cambia, a una sangre roja y espesa, y los peces que antes eran lindos y amables ahora son personas sin torso, sus ojos están oscurecidos completamente, y sin pelo, completamente grotescos, que se acercaban a Vel. Cuando trato de escapar de hay, aquellos pétalos hermosos y suaves ahora eran fragmentos de cristales gigantes que impedían el paso de él, haciendo una pared de cristal de diferentes colores. Grises, rojos, violetas y naranjas marcas dentro de los cristales, y siendo finalmente alcanzado por esas cosas, se acercaron y arrastraron hasta el fondo de ese lago muerto, y cuando logro ver el fondo, noto una silueta de una persona, un hombre al que se acercaba más y más, solo noto unos ojos grises llenos de esperanza.
Cuando esto paso, el despertó tranquilamente, con el corazón alterado, y con algunas lagunas en su mente, sobre el significado de eso.
Cuando escucho un sonido, unas palabras de una voz familiar.
-Qué buena noche... ¡Oh vaya! ¿Qué no se supone que no me querías?
Pregunto ese alguien, John quien estaba siendo abrazado ligeramente por Vel, quien estaba recargandoce sobre John, con su mano en su pecho, y su cabeza sobre su hombro.
-¿Qué? Espera ¡no!
Exclamo Vel, y después alejandoce de John.
-Tranquilo, lo de anoche, no diré nada y, me gustaría demostrarte que te quiero. Dejando a Vel tranquilo, y algo inseguro de lo que podría pasar en un futuro, quizás no muy lejos.
Trato de acomodarse sobre su asiento, más no lo consiguió, y mejor se puso en pie, tomando su mochila, y sacando una pasta de dientes se fue en dirección hacia el baño. Al llegar con un paso un poco acelerado, estaba limpio y fresco, ninguna mancha de sangre o parecido, ni en el baño ni en el camión. Cuando se dio cuenta el tapis de los asientos era diferentes, rojo con gris y amarillo, y en algunos negro en vez de gris. El de él y John eran negros, recordando que iba hacer entro en el baño y tomo su cepillo de dientes, pero no lo encontraba y una voz persistente en su tono lo hizo volver la cabeza.
-Dime, tu cepillo ¿es este?
Pregunto un chico señalando el cepillo verde, el joven alto, más alto que Vel, casi de la misma altura de que John siendo más alto él, con cabello largo y de color negro, lacio que le llegaba hasta los ojos, piel blanca demasiada pálida casi muerta, ojos violeta y en los bordes morado. Con una camisa negra de mangas largas enroscadas por en sima de los codos, con un pantalón ajustado que dejaban ver las fuertes piernas de ese chico, el pantalón verde obscuro y unas botas, con cadenas rodeando la cintura y un estuche para una navaja con las iniciales C.N.
-¿Te puedo ayudar? Mi nombre es Deniel Derey, 16 años. Dijo el mismo chico haciendo una presentación elegante y a los ojos de Vel, aburrida.
-Si quieres tu cepillo necesitas quitármelo, te mostrare e infirmare que yo soy quien va a mandar aquí, ¿De acuerdo?
Dijo Deniel jugueteando con el cepillo.
-No quiero problemas, solo dame el cepillo. Dijo Vel tratando de quitarle el cepillo pero el otro chico se movió dando un paso para atrás y riendo del intento de Vel.
-Ya te dije, ganándome y te lo daré. Replico Deniel meneando el cepillo.
A lo que Vel dio una patada al estomago de Deniel, haciéndolo retroceder cubriendoce el estomago, Deniel trato de devolver la patada pero Vel se agacho y golpeo la pierna con la que se sostenía en pie el chico, doblando la rodilla y haciéndolo caer sobre el piso.
-Dame el cepillo. Dijo nuevamente Vel, pero fue emboscado por los otros chicos que acompañaban a Deniel, tomándolo de los brazos y sosteniendo su cabeza hacia arriba, Vel como era evidente, forcejeaba tratando de soltarse, pero Deniel se levanto y dio un golpe con la mano.
Vel soltó un sonido de dolor, a lo que Deniel replico de manera burlona;
-Te dije quien mandaba aquí. Preparando nuevamente la mano para soltar otro golpe en la cara, Vel se preparo pero no aparto la vista de él.
Cuando estaba a punto de soltar el puñetazo llego John deteniendo el golpe con su mano, y su cara cubierto por los brillosos cabellos.
-Detente, solo dale el cepillo y se acaba. Dijo John.
Deniel tratando de soltarse no lo logró, pero cedió y le arrojo el cepillo a Vel, John soltándolo y los chicos, y se fueron murmurando palabras indefendibles, seguramente palabras obscenas, pero John como Vel ignoraron eso.
John le recogió el cepillo y se lo dio a Vel.
-Gracias. Dijo Vel agradeciéndole a John, pero él tomo la mano de Vel y dijo;
-No quiero que te hagan nada, solo llámame si necesitas algo, no permitiré que te pase algo.
Apartandoce y regresando al asiento.
-Cielos... que mal, será mejor apurarme. Dijo Vel regresando al baño a lavar su cepillo.
Cuando se estaba lavando los dientes dejo abierta la puerta, y al momento de agacharse a escupir, pudo sentir unos brazos rodeándolo, respondiendo en un salto por la sensación tan repentina, giro la cabeza a ver quien era, y era John que tenía su boca contra la nuca de Vel.
-¿Qué haces?
Pregunto Vel, siendo respondido por John.
-En publico no puedo hacer esto.
-Hacer ¿qué?
Volvió a preguntar Vel
-Abrazarte tonto. Respondió John, y dejando una cierta calidez en el cuerpo de Vel, pero cuando reacciono la puerta estaba cerrada con seguro.
-Dime, ¿cuál era tu verdadero propósito?
Pregunto Vel, e inmediatamente fue soltado por John, con una cara alegre y feliz, como de satisfacción.
-La verdad es que iba a bañarme pero el otro baño esta siendo usado por Paty, es mujer tu entiendes...Entonces pensé que estaba vació aquí, y te encontré, así que decidí darte un abrazo, de hecho tengo mi ropa aquí, si quieres verme desnudo solo tienes que decirlo, no estar de infiltrado en el baño.

-¡¿Qué?! N-no, no quiero verte así, mejor me salgo... No quiero verte desnudo. Dijo alteradamente Vel, y recogiendo sus cosas.
-¿En serio no quieres verme?
Pregunto John con un tono divertido.
-No, además ya sabes las reglas, ahora mismo me voy. Dijo Vel tomando su pasta dental y cepillo aún con un poco de espuma.
-No espera, era broma... Solo digo que te esperare, el tiempo que sea necesario.
Dijo John tomando de la mano a Vel, pero el retirandoce sutilmente al atravesar de la puerta.

Vivo por fuera y muerto por dentro III

Verán por unas ciertas escenas, los capítulos pueden ser más cortos pero hasta abajo pondré la descarga para que lo lean completo.


Capitulo 3- ¿Lujuria?

-A-Ah que viene esa propuesta?
Pregunto exaltado y sonrojado Vel.
-Nada... es solo que...
Siendo interrumpido por Albert.
-Vaya, con que haciendo amigos, es bueno, ya que pasarán el resto del viaje.
-¡¿Qué?! esta diciendo que hay un punto de llegada. Dijo una niña de quince años, cabello corto, lentes normales no muy grandes, una falda larga color azul, una camisa del mismo color, pero un tono más claro, y un abrigo rosa, regido a mano, y un tono delicado y amable.
-No, no hay algún lugar... oh ¡vaya! una chica aquí, ¿qué no tienes que estar en el camión de mujeres?, ¡¿Que diablos haces aquí?!. Gruñendo Albert, asustando a la joven.
John levantandoce repentinamente y tratando de defender a la niña diciéndole a Albert;
-Oyes cálmate, deja que explique.
A lo que Albert se enoja y lo empuja contra el asiento golpeando a John con Vel, sintiendo la espalda y un poco de los músculos de John para detener el choque.
-Esta bien, explícate- Dijo Albert cruzando las manos.
-Púes, mi hermano tiene un pequeño problema y no puede estar solo y no hay más espació en el camión de haya. Sentada alada de un joven dormido con 13 años, Albert diciendo.
-Bueno... si es una carga es mejor acabar con ¡ellos!
Apuntando con una revolver al chico, pero al momento la chica se interpone en el paso.
Además puedes dormir en el piso o algo así muchacha  estúpida.
Albert consternado, guarda el arma, posiblemente al ver la mirada de protección a cualquier costo, se va y pregunta.
-¿Cómo te llamas niña?
A lo que ella responde. -Paty, señor.
Y se va, dejando una tensión en el aire amargo con un toque de sangre. John se calma y voltea a ver a Vel con una sonrisa que emitía tranquilidad.
-Es solo ¿qué?
Pregunto Vel, cruzando las manos.
-¿Qué cosa?
Dijo John.
-Lo que ibas a decir. Dijo Vel e inmediatamente siendo respondido por John.
-Eres guapo, solo eso. A lo que Vel se sonrojo y pregunto
-¿Crees que qué?
Cuando Paty intervino.
-No quiero sonar grosera pero, la homosexualidad no se permite.
-Lo sabemos. Diciendo John tomando de la mano a Vel y llevandocela a su pecho, donde Vel podía sentir los fuertes y calientes músculos.

-¡¿Qué haces?!
Exclamo Vel aún más sonrojado y retirando la mano de la mano de John.
-Como quieran, yo cumplo con advertirles y recordar las reglas. Regresando Paty a su asiento.
-Bueno, en fin... dime ¿Has tenido novia?
Pregunto John con una tranquilidad algo inquietante.
-¿Eh? No. Dijo Vel mirando detenidamente a John.
Cabello amarillo ondulado pero no chino, y algo desarreglado, ojos agrises como la luna llena en la noche de un suceso hermoso, piel blanca, vestía unos jean's azules, una camisa de lycra pegada que se pegaba y dejaba ver los músculos marcados, bien desarrollados y más grandes que los de él y en el cuello un collar con su nombre. Haciendo sonrojar a Vel sin darse cuenta.
-¿Por qué te sonrojas tan repentinamente?
Pregunto John mirando a Vel y la guapo que se veía.
-¿Qué? Y-yo no me sonrojo- Encojiendoce entre hombros, y mirando a John.
-Que lindo. Soltó John sin darse cuenta, Vel solo se escondió más.
-¿Cuantos años tienes?. Pregunto Vel.
-Tengo 16, ¿y tu?
Respondió cortesmente, y haciendo la pregunta de la misma manera.
-Yo, tengo 14. Vel miro a los ojos a John, y lo que dijo sin pensar.   -¿Por qué no?.

Siguiendo con el camino, se detuvieron en una gasolinera, donde les dieron unas cortinas, para que las instalaran dentro del camión, para así tener más privacidad. De cierta manera, John estaba más cómodo, y el resto del camino fue solo charla, con John y con Paty.
-Y... ¿que te gusta hacer Paty?
Pregunto Vel.
-Me gusta leer, tejer y de hecho, este suéter lo hice yo, también me gustan los postres. Respondió Paty placenteramente.
-¿Cómo se llama tu hermano?
Pregunto John mientras buscaba algo entre sus cosas, cuando sacó una mochila.
-Se llama Jorge Rodrigo Guevar. Dijo Paty mientras abrazaba al joven.
En ese lapso Vel apreciaba contentamente la hermosa y magnifica vista que estaba atrás de la ventana, un bosque lleno  de vida, con hojas brillantes verdes, majestuosas obras de arte,con robles fuertes y magníficos, además de gruesos.
Al ser interrumpido por John, que le dio la mochila, y al abrirla vio unas revistas, al momento de notar la silueta de una mujer joven con el torso desnudo cerró inmediatamente la mochila aventandosela a John.
Al rededor de las doce o una de la noche aún hablaban, con la voz baja, pero hablaban.
-Dime... ¿tu has tenido novia?
Pregunto Vel un poco tímido por la respuesta.
-Si, al rededor de unas nueve, ¿por?, ¿te dan celos?
Dijo John en un tono burlón y dando unos pequeños golpes.
-¡¿Qué?! No, es solo que... me daba curiosidad... Además por que tanto interés en eso. Sermoneo Vel.
-Es solo que, quería asegurarme que fuera tu primero. Dijo John mientras se acercaba, de una manera incomoda para Vel.
-¿Qué quieres decir?
Pregunto Vel con mucha duda.
-Desde que te vi como disparabas sin miedo y completamente seguro… me llamaste la atención. Acercandoce a su oído y susurrándole.
-Me cautivaste.
-No, esto est- Interrumpido por John que le daba un beso.

jueves, 26 de diciembre de 2013

Vivo por fuera y muerto por dentro II

Capitulo 2- Rompecabezas


Tenía once años, cuando esto comenzó, verás, vivía en una casa grande, mi propio cuarto, uno para mis padres y otro para la sirvienta y su hija, era enorme la casa, teníamos tres patios, uno para estacionar los carros, otro atrás que exclusivo para mamá y sus plantas, y uno de juegos donde jugaba con la hija de la sirvienta.
Mi madre se llamaba Lucia Susssian, mi padre Edgar Blou, me parece, creo por mis apellidos, en fin. 
La sirvienta se llamaba Mónica Sunuu y su hija Jimena Sunuu, eran de algún rancho o algo así. Yo me llevaba muy bien con ambas, mis papás me acuerdo que se querían mucho, se amaban, aún me acuerdo de aquellos ojos llenos de esperanzas.

Mi madre era alta, de cabello rojo y ojos azules, voluptuosos y delgados, de piel pálida casi blanca y siempre llevaba un vestido con una apertura a un lado de sus vestidos. 
Mi padre era alto y fuerte, cabello negro y ojos verdes como los bosques y moreno, siempre de traje y con miles de corbatas diferentes. 
Moni como yo le decía, era de baja estatura, un poco rellena, morena, con cabello lacio y negro, y los ojos café como la arna del mar, claros. 
Y al final, Jime, era un poco más baja que yo, y me ganaba por un año de edad, cabello ondulado negro, ojos amarillos como un rayo atravesando el cielo, y morena como su madre. 

Mis padres eran amables, cariñosos y estrictos, pero me cumplían muchos caprichos. Moni cocinaba increíble, según recuerdo ella estaba con mis papás desde antes de que yo naciera, y Jime, básicamente crecimos juntos. Ella era muy ruda y a la vez amable con todo animal.
Un día, yo estaba en el comedor esperando el desayuno con Jime, ambos estábamos de vacaciones por lo que traíamos aún las pijamas, estábamos en la misma escuela por capricho de mi madre de que no quería que alguien muy querido estudiara sin oportunidades, por lo mismo Moni trajo a Jime con nosotros y que mi madre quería ver cómo era. Moni estaba cocinando huevos en forma de omelet con un rico espagueti francés, y sabía que era, por el tan peculiar olor a especias delicadamente medidas y la pasta finamente cocinada con los mejores ingredientes, y los miles de ingredientes más, yo recuerdo que mi madre le compraba miles de libros de cocina, y todos lo leía, croe que por eso también Jime era muy buena escribiendo y leyendo... 
En fin, ese día mi madre no había ido a trabajar por unas comprar que necesitaba y quería pasar el día con nosotros, ella bajo con un vestido blanco, tacones rojos y una pieza extra de tela que usaba como abrigo del mismo color que los tacones, y con el mismo propósito que nosotros, comer.
Cuando Moni nos estaba sirviendo la comida y la cual olía increíble, mi madre fue abrir la puerta, ya que alguien tocaba fuertemente, cuando estaba a punto de darle una mordida escuche un grito y el nombre de mi padre "¡Edgar!"
Mi padre estaba ensangrentado por la espalda, y su pulso cada vez era menos persistente, mi madre preguntaba repetidamente "¡¿Qué te paso?! ¿Por qué?!".
Moni ayudo a mi madre a subir a mi padre al sofá, ese día, me acuerdo bien, estaba usando una corbata que yo le había regalado semanas antes en su cumpleaños, era azul fuerte, con triángulos grises y blancos, era bonita más no tenía un buen estilo.
Mi padre trataba de consolar a mi madre. Cuando ya no quedaba más que hacer, y mi padre estaba en el filo de la muerte, se empezó a despedir -Moni, Te conozco desde hace mucho tiempo, y siempre fuiste una gran mucama, no, una gran amiga y compañera, siempre cumplida y confiable... Jime, la niña más bonita y simpática que he visto en mi vida, yo se que serás una mujer fuerte y sin miedos, nunca te rendirás eso yo lo sé, nunca olvidare tu linda cara de felicidad." Siendo interrumpido por una fuerte tos, tan fuerte que pude ver como escupía sangre, y en grandes cantidades... 
Todos estábamos tristes y angustiados, cuando llego la hora de despedirse de nosotros. "Amor, Lucia, me has hecho la persona más feliz de todo el mundo, de la galaxia entera, me has dado un hermoso hijo, una gran felicidad con este imperio que hemos hecho y construido juntos, siempre me apoyaste y nunca dudaste de mi... Te amo, y eso nunca lo olvides, yo siempre te amare, en esta y las vidas que sigan" Besando ligeramente a mi madre. Y yo, "Hijo, ven, sabes que siempre te quise y eres la persona a la que más quiero... Un compañero audaz y siempre certero, inteligente como un genio. Vez la corbata, la use porque te quiero mucho, mucho hijo" acabando con un beso en mi cabeza, solo note que mi padre le decía en la oreja a mi madre unas palabras que yo no escuche. 
Solo vi como el alma de un hombre tan fuerte, protector y amable que era mi padre, se levantaba y dejaba el cuarto donde nosotros cuatro estábamos.
Cuando por fin todo acabo, mi madre se levanto y limpió las lágrimas, tratando de ser fuerte, y hablo por su teléfono celular, estaba hablando con alguien y recito unas palabras que nunca olvidare y sigo sin comprender, "Código cero cero nueve tres cinco Outbreack".
Cuando ella dijo gritando "¡¿Están aquí?!". 
Cuando eso acabo es escuchaban los mismo sonidos que las cosas de ahora, pero aún más horribles, eran humanos desnudos pero tenían otro par de piernas que usaban para moverse ferozmente, eran rosa grotesco, con los ojos cosidos, dientes filosos y grandes, y una lengua larga pero de una manera monstruosa, además de moverse como monos sobre las paredes y caminar como ranas en el piso firme. Mi madre saco de la mesa una metralleta grande y larga, desconozco el modelo pero era increíble, corrimos hacia el parque de atrás, donde mi madre abrió una escotilla y nos introdujimos en ella, pero mi madre no vino con nosotros, ella se quedo. 

Yo grite y llore, pero Moni nos calmo a mí y a Jime con palabras que nos calmaban satisfactoriamente, ese día ya había perdido a dos seres que amaba con todo mi corazón y siempre recordare, cuando llegamos hasta el tope del elevador, era un pasillo con solo dos cosas, dos ascensores, y no decía a donde dirigían, seguramente estábamos debajo de nuestra casa, Moni nos metió a mí y Jime en cada una, solo había espacio para uno, pero bien estaríamos Jime y yo, con Moni en la otra, pero no, solo se escucho una alarma y Moni disparo los ascensores.

Podía ver un momento como Moni fue devorada, desmembrada y gritaba de dolor que era causado por esas cosas.
Cuando iba subiendo, una de esas cosas me estaba siguiendo, yo no quería pensar en eso, Moni, mamá y papá habían muerto... Y Jime no sabía dónde estaba, o hacía donde había ido a llegar.
Cuando percibí los rayos de sol que me tomaron sin cuidado, al momento de detenerse el elevador yo salí de esa capsula y vi otra gran casa, era más pequeña pero igual de lujosa y similar a la que tenía, salí corriendo de ahí con esa cosa saliendo del orificio por debajo de la capsula, y cuando se lanzo en sima de mi abriendo su enorme y sanguinaria boca, vi como fue empujado por unas pequeñas bolitas, y cuando azoto contra la pared, mire atrás mío, y vi a la mujer que me regalo mucho cariño y era amiga de mi mamá. La conocía porque en cenas ella platicaba mucho con mamá, y a veces nos iba a visitar, con una gran arma cargando, y una pequeña niña detrás de ella, que era Anny... desde entonces viví con ellos, después de unas horas, ese lugar ya no existía, desapareció,  porque fue autodestruido por una gran bomba que seguramente, estaba automatizada y dentro de mi casa, por eso nos sacaron rápidamente, no me acuerdo bien en que trabajaba mi padre... pero creo que estaba relacionado con esto.
Durante un año, viajamos a un lugar, Querétaro, donde me subí en este camión... y eso es todo, me encariñe mucho con la Señora Andrea que dio su vida por proteger a Anny, y ella... ahora es mi única familia y tengo que protegerla. 

-Esa es toda mi historia. Ahora estoy aquí tratando de sobrevivir. Termino de decir Vel, que le contaba al joven que era su compañero de asiento.
-Qué triste... pero sabes, no es toda la familia que tienes, digo bueno... Si quieres, me gustaría ser tu familia o a proteger a Anny... Y mi nombre es John Lier.

A lo que Vel se sonrojo